Aunque muchas personas necesitan lágrimas artificiales, es normal que la gente se autodiagnostique en el uso de estos productos. En el mercado encuentras una amplia variedad de colirios que no requieren recetas para adquirirlos.
No obstante, hay que conocer las causas para las que la necesitas y no siempre considerar que se trata de una alergia o fatiga visual, el enrojecimiento o picor en los ojos. En muchas ocasiones el inconveniente se genera a causa del síndrome del ojo seco.
La composición de las lágrimas artificiales
En palabras simples, las lágrimas artificiales son preparados especiales que se encargan de imitar la composición natural de las lágrimas y son empleadas cuando la producción es insuficiente por el propio cuerpo.
También son recetadas para ayudar a mejorar la visión cuando la producción de lágrimas no es suficiente para humectar o lubricar el ojo. Es necesario destacar que es un producto que no se encuentra solo en forma de gotas para los ojos.
Puedes encontrarlas en el mercado en forma de gel o de pomadas intraoftálmica. Sin embargo, la preferida y las más recomendadas son las gotas porque resultan más simples de usar.
¿Cuál es la finalidad de este producto?
Las lágrimas artificiales, contengan o no una solución acuosa, funcionan mejor para lubricar los párpados e hidratar los ojos porque contienen componentes activos como el conocido ácido hialurónico.
Al no funcionar por volumen, sino por sus características físicas, pueden suministrarse en forma de pomadas u otros preparados más espesos que los colirios. La sensación de cuerpo extraño en los ojos, también conocida como «sensación en los ojos», se alivia durante horas al hidratar la superficie ocular y reducir la fricción del parpadeo en los ojos secos.
Además, disminuye el riesgo de desarrollar conjuntivitis o blefaritis debido a una producción inadecuada de lágrimas. Cuando hay un empeoramiento transitorio, como ocurre con el uso sostenido de mascarillas, algunas lágrimas artificiales contienen activos botánicos o antihistamínicos suaves para aliviar las molestias en los casos leves.
Tipos de lágrimas artificiales disponibles en el mercado
Además de los geles y pomadas para aplicar dentro del ojo también encuentras diferentes tipos de lágrimas artificiales si las prefieres en formato de gotas o soluciones oftálmicas. Dentro de los tipos comunes encuentras los siguientes:
Con o sin conservantes
Las lágrimas artificiales monodosis no suelen llevar conservantes, lo que reduce la posibilidad de respuestas alérgicas. Por ello, son la mejor opción para las personas que necesitan lágrimas para sus ojos pero que luchan contra la excesiva sensibilidad ocular en general.
Afortunadamente, siempre puede encontrar un producto con otro ingrediente que sirva de conservante si tiene alergia a uno de ellos. A excepción de algunas empresas que eligen el dispensador para garantizar la esterilidad del contenido, todas las lágrimas artificiales multidosis tienen conservantes en su formulación.
Lágrimas monodosis y multidosis
Al igual que otros colirios, las lágrimas multidosis vienen en un envase. Antes de la fecha de caducidad, que empieza a contar en el momento en que se abren, pueden utilizarse numerosas veces.
Los conservantes son necesarios para evitar que las bacterias crezcan en los viales de lágrimas multidosis, lo que puede empeorar los síntomas de los ojos extremadamente secos o provocar alergias. Además, el envase puede tener un dispensador que esteriliza todo lo que contiene.
Las lágrimas monodosis deben usarse inmediatamente, en un corto periodo de tiempo o en la misma aplicación. No olvide leer el prospecto antes de utilizar una nueva marca de lágrimas falsas monodosis porque contiene información relacionada con este tema.
Para las personas con síntomas leves o moderados del síndrome del ojo seco, se suelen recomendar soluciones oftálmicas que permitan varias aplicaciones durante horas concretas.
Añadir comentario