Al igual que otras cosas, la alimentación también tiene sus mitos, falsas creencias que no sabemos cuando empezaron o cómo lo hicieron, pero se van pasando de generación en generación.
Es posible que antes ya hayas escuchado que los japoneses no toman agua con las comidas. Esta información se ha vuelto popular en Internet, y muchos apuntan a supuestos beneficios que trae esta práctica.
Detrás de esta afirmación hay una teoría que indica que el agua con las comidas diluye los jugos digestivos. Esto, lleva a peores digestiones, aumentar de peso y a absorción de nutrientes.
Los especialistas advierten que todo esto es falso.
El agua no puede empeorar la digestión
Después de comer puede ser habitual una mala digestión, si te excedes de cantidades de comidas o bebidas, e incluso si comes algo que no toleras. Pero no es algo que suceda como consecuencia de beber agua.
Los expertos hablan de que esa idea de que el agua diluirá los jugos digestivos en el estomago y afectará la digestión es falsa y existen varias razones que lo demuestran.
Este proceso desde que ingresa a la boca el alimento, y termina en los intestinos dura de 24 a 72 horas. Luego que la comida es masticada y tragada, pasa por el esófago hasta llegar al estómago, donde los jugos gástricos la descomponen. En cambio, el agua se adsorbe rápidamente en el estómago. Lo que se traduce a que cualquier posible dilución seria transitoria.
En conclusión, el proceso de digestión de los alimentos puede tardar varias horas, en cambio el del agua pasa rápido por el estómago.
El agua tampoco afectará la acidez del estómago
Debido a que como se ha indicado en el punto anterior, la concentración no es fija, sino que se requiere más para digerir los alimentos, el órgano producirá más.
De la misma manera, tomar agua durante las comidas no obstaculizará la actividad de las enzimas, que afectaría la estimulación de los nutrientes. La razón de esto es que las enzimas de adhieren a las partículas de las comidas sin importar si hay o no presencia de agua. Esto lo indican especialistas en nutrición.
Inclusive, los expertos en el teme indican que tomar agua durante o después de haber comido alimentos ayuda a que el cuerpo pueda descomponer y procesar los alimentos y de esa manera pueda absorber mejor los nutrientes. Además, puede evitar el estreñimiento, pues ayuda a ablandar las heces.
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